Hernias Umbilicales
Una hernia umbilical se produce cuando una parte del intestino sobresale a través de la abertura de los músculos abdominales cerca del ombligo. Las hernias umbilicales son frecuentes y, en general, son inofensivas.
Las hernias umbilicales que aparecen en la adultez tienen más probabilidades de necesitar una reparación quirúrgica
Busca atención de emergencia si presentas los siguientes síntomas:
- Parece tener dolor a nivel del ombligo.
- Vómito.
- Tiene sensibilidad, hinchazón o decoloración en el sitio de la hernia.
Habla con el médico si tienes un bulto cerca del ombligo. Busca atención de emergencia si el bulto se vuelve doloroso y sensible al tacto. Un diagnóstico y un tratamiento inmediatos pueden ayudarte a prevenir las complicaciones.
Las complicaciones de una hernia umbilical son poco frecuentes. Las complicaciones pueden producirse cuando el tejido abdominal que sobresale queda atrapado (encarcelado) y no se puede empujar para que vuelva a la cavidad abdominal. Esto disminuye la irrigación sanguínea en el segmento de intestino atrapado y puede producir dolor abdominal y daño en el tejido.
Si al segmento de intestino atrapado se le corta por completo la irrigación sanguínea, puede haber muerte del tejido. La infección puede diseminarse a toda la cavidad abdominal y provocar un cuadro que pone en riesgo la vida.
¿En qué consiste la Plastia Umbilical?
La cirugía normalmente se recomienda para evitar posibles complicaciones, en particular, si la hernia umbilical aumenta de tamaño o causa dolor.
Durante la cirugía, se hace una pequeña incisión cerca del ombligo. El tejido afectado por la hernia se regresa a la cavidad abdominal, y la abertura en la pared abdominal se cierra con puntos. En los adultos, los cirujanos suelen usar una malla para fortalecer la pared abdominal.